miércoles, 8 de octubre de 2008

La Leyends

Hace poco comentaba a mi chica que en la vida nos van picando gusanillos de cosas que nos gustaría hacer, lugares que conocer, destrezas que aprender, curiosidades que saciar, etc. Más o menos, no recuerdo bien, pero creo que hace unos quince años que toco la guitarra... de oído. Al principio un vecino me dejó una para 'intentar aprender', y con la ayuda de otro que hoy es tenor, fui aprendiendo los acordes. Más tarde una amiga me regaló una que se había encontrado en un piso al que se mudaba. Con el tiempo mi cariño por esa guitarra fue aumentando y un día la decidí pintar con los colores rojo, amarillo y verde... esos años locos.
Martín, colegazo de toda la vida, quedó impresionando la primera vez que la vio y le puso el nombre de "Leyends". Sabiendo yo que sus artes a la hora de dibujar eran buenas le pedí que pintara ese nombre sobre el clavijero. Y poco a poco, con muchos viajes de por medio, infinitas guitarreadas, caras de asombro al verla, querer pagar compras en el super cantando con ella, serenatas, bailes a su compás, pero sobre todo la sensación de siempre estar compartiendo algo con los demás, la leyenda de "La Leyends" (valga la redundancia) , fue creciendo, y mi amor sobre ella también. Si el día ha ido mal, la toco un poco y todo parece no ser tan importante. Si todo va bien, la toco y nos divertimos. Melancolías, recuerdos, alegrías, sinsabores, historias, imaginación... ella todo lo recibe y transforma como si fuera un elemento más de la naturaleza.
Bueno, que me he ido un poco por las ramas, aunque podría escribir todo un libro sobre ella. El tema es que le comentaba a mi chica que en la vida nos van picando gusanillos de cuestiones que queremos hacer. Y como tenía una cuestión con mi "Leyends", decidí que llegó el momento de hacer solfeo, aprender a leer pentagramas y ponerme un poco las pilas en este sentido. Después de algunas clases he concluido que estoy, más o menos, como aprendiendo a leer de nuevo. Y es muy, pero muy complicado aprender a leer con 33 años. Pero el empeño ahí está y las tremendas ganas de comprenderlo todo también. Pero todo sea por mi Leyends, ella creo que está comenzando a apreciar los cambios y la dedicación que estoy poniendo para que suene cada día mejor.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

yo estaba el día que la pintaste, te acordás que con lo que sobró te pinté la tulipa de una lámpara? tuvo repercusión incluso cuando la quisieron tirar el portero de perón la pidió y la puso en el hall según matías bíscaro, yo pasé pero nunca más la volví a ver. Alej cavalli

esteban dijo...

Mat,entre a tu blogg por casualidad.
Y te escribo porque creo que te resultara gracioso el motivo de mi consternacion.
Tu foto:sera casualidad,sera la foto que has elegido o el perfil.Pero estube pegado a ella un buen rato para lograr deducir que no se trataba de una foto mia.
La sensacion fue algo fantasmagorica.Solo encotre dos diferencias:el color de las gafas y el lobulo de la oreja.
Un saludo:tu clon fotografico