Morir por una causa

Me encuentro por esto días leyendo sobre la vida de Jesús, entre otras cosas. He retomado mi costumbre de leer filosofía, pero finalmente, y después de mucho esperar, me he decidido a adentrarme en la vida del, tal vez, personaje más famoso de la historia de la humanidad. Digo tal vez, porque en otras partes del mundo existirán otras personas que simbólicamente representan más. Pero en el caso de occidente, creo que es la figura clave de nuestra historia. Sobre todo por el momento histórico en el que aparece y como une la filosofía con la religión, además de llevar a ambas a la práctica.

He rescatado documentos provenientes de todas partes, incluso hasta visiones que han tenido gentes que más tarde han sido proclamados beatos, así como adentrarme un poco en la lectura de lo Evangelios Apócrifos. Pero como calculo le sucede a todos lo que investigan algo que da mucho que hablar, los datos de unos no son iguales a los de otros. De ahí que sea tan difícil sacar una conclusión válida sobre la vida real de Jesús.

También ha caído en una buena época comenzar a leer sobre este tema ya que estamos en Navidad, época en que se recuerda su nacimiento. Sobre esto tampoco se ponen de acuerdo. La Beata Ana Catalina Emmerich dice que María estuvo asistida en el parto por un ángel y a su vez que tenía una sirvienta. Pero en el Evangelio Árabe de la Infancia, explica que estuvo asistida por una anciana que pasaba por allí. Por su parte, Lucas en la Biblia hace un escueto comentario acerca de su nacimiento y no da muchos detalles. La verdad que con todo esto, y siendo su punto de partida, es decir el nacimiento, se complica bastante constatar la verdad de lo que realmente sucedió.

Es una pena y al mismo tiempo lo más bonito de la historia. Es como cuando nos adentramos en otros tantos misterios, como pueden ser la filosofía y cultura griega, o los egipcios. Lo que si me queda claro, es que Jesús murió por un ideal. Él confiaba ciegamente en lo que decían sus sentidos y su razón, una extraña mezcla aritotélico - platoniana, al mismo tiempo que fue consciente de la necesidad de una religión grande y unificadora que tenía la gente por entonces. Al igual que otros tantos en la historia como Sócrates o Galileo, decidió morir por una causa, por su causa, que al mismo tiempo era la de todos. Y con el solo hecho de pensarlo se me pone la piel de gallina. Dejar todo esto, lo único que realmente es tangible y conocemos, por creer en una causa mayor, que es la suya propia y la de todos.

También creo que todos tenemos una causa por la que vamos a morir. Es innato a la condición humana. En algunos casos será más o menos relevante en la historia de la humanidad, pero creo que todos luchamos por algo en esta vida. Y de ahí mi pregunta final ¿Somos causa, o efecto de nuestra causa?